La tercera edad

Después de los 65 años se producen numerosos cambios físicos y, por eso, es fundamental prestar especial atención a las necesidades del cuerpo y a las señales que da, para llevar una vida saludable. Entre las principales transformaciones a las que se enfrenta el organismo de los mayores, se encuentran aquellas asociadas con el aparato digestivo que se manifiestan en el tránsito intestinal. Dispepsia funcional: Se refiere a las molestias y/o dolor que se produce en la parte alta del abdomen. Algunos pacientes se quejan de dolor, hinchazón, acidez o náuseas, mientras que otros presentan indigestión. En los pacientes con dispepsia, el estómago no se relaja en respuesta a una comida, observándose también alteraciones de las contracciones y del vaciamiento gástrico. En algunos casos, se puede presentar, también, una mayor percepción de la actividad gástrica, lo que se denomina hipersensibilidad visceral. Su causal se debe fundamentalmente a:
  • Anormalidades de la motilidad gastrointestinal, con la edad, en el aparato digestivo hay enlentecimiento de la motilidad gastrointestinal y descenso en la secreción y velocidad de vaciado gástrico.
  • Aumento de la sensibilidad visceral a los estímulos provenientes de la luz del tubo digestivo.
  • Anomalías en la esfera psicoemocional, en la edad senil la declinación psíquica restringe los contactos humanos, lo cual significa apatía, depresión y anorexia.
Malabsorción intestinal: Se caracteriza por una absorción inadecuada de nutrientes desde el intestino hasta su incorporación al torrente circulatorio o a la linfa. Se considera que hay malabsorción cuando existen determinadas alteraciones en el interior del intestino, en su pared o en el transporte linfático. Los síntomas pueden ser: diarrea, esteatorrea, pérdida notable de peso, anemia y desnutrición, derivadas del trastorno en la absorción de varios nutrientes, como grasas, proteínas, carbohidratos, vitaminas y minerales. Alteraciones metabólicas del hígado: El hígado es el órgano principal encargado de la biotransformación de los fármacos, sintetiza proteínas que transportan medicamentos en la sangre, mantiene la presión osmótica del líquido extracelular y sintetiza otras moléculas activas, como diversos factores de la coagulación. El envejecimiento de este provoca los siguientes cambios:
  • Disminución del tamaño del órgano, así como del flujo sanguíneo con redistribución del flujo sanguíneo regional
  • Reducción en la actividad de las enzimas microsómicas hepáticas y de sus funciones metabólicas.
  • Disminución de la síntesis proteica, con reducción de la albúmina plasmática y de la vitamina k.
Incontinencia fecal: La continencia fecal es el resultado de la existencia de una serie de barreras para controlar la evacuación de las heces. Dichas barreras son reversibles y, al desaparecer, permiten la defecación. La continencia fecal incluye los siguientes mecanismos: llegada del contenido fecal al recto, distensión y acomodación rectal, respuesta del esfínter anal interno, sensación rectal y pélvica, además de la respuesta del músculo esquelético. Las heces se retienen habitualmente en el colon sigmoideo y se presentan en el recto solo de forma intermitente. La acomodación rectal a la distensión depende del sistema nervioso intrínseco y de su propia musculatura lisa. El esfínter anal interno es el principal responsable de mantener la posición de reposo en el conducto anal; su hipotonía se ha relacionado con la aparición de incontinencia fecal en ciertos grupos de pacientes, como en diabéticos, después de efectuadas dilataciones anales, en la senectud y en algunos individuos que presentan incontinencia neurogénica o idiopática. Diverticulosis intestinal y colónica: La diverticulosis intestinal y colónica es poco común antes de los 40 años y se incrementa con la edad, desde 5 % en la quinta década de la vida, hasta 50 % en la novena. Cerca de 80 % de quienes la padecen están asintomáticos; esta se diagnostica mediante una exploración de colon (radiográfica o endoscópica), al intentar conocer la causa de las molestias abdominales. El síntoma principal es el dolor abdominal continuo o intermitente, por lo general poco intenso y localizado sobre todo en la fosa ilíaca izquierda. Suele aliviarse con la evacuación o expulsión de gases o ambos y empeorar después de la ingestión de alimentos. En ocasiones la enfermedad diverticular del colon evoluciona con dolor intenso que dura desde unas horas hasta varios días y clínicamente es difícil de diferenciar de la diverticulitis aguda. Los pacientes pueden presentar, además, variación en el ritmo de las deposiciones (estreñimiento o diarrea o ambos), distensión abdominal, tenesmo rectal y expulsión de moco con las heces. Estreñimiento: Este es un síntoma causado por numerosas enfermedades y otras circunstancias, caracterizado por su complejidad patogénica y fisiopatológica. Los ancianos son los más afectados por el estreñimiento, con una prevalencia del 23 y de 42 % en hombres y mujeres mayores de 60 años, respectivamente. La evaluación diagnóstica en estos pacientes debe excluir, mediante las exploraciones pertinentes, las causas orgánicas locales (sobre todo el cáncer colorrectal) o las sistémicas, capaces de alterar el ritmo defecatorio; también es preciso revisar las condiciones higiénico-dietéticas, la ingestión de fármacos, así como también las condiciones familiares y sociosanitarias. Una vez descartadas las posibles causas del estreñimiento, se analizarán las condiciones fisiopatológicas del transporte colónico y la evacuación rectal, los cuales pueden dividirse en dos grandes grupos:
  1. Por alteraciones en la progresión colónica del contenido fecal (estreñimiento de tránsito).
  2. Por trastornos en la evacuación rectal (estreñimiento distal o por obstrucción funcional del tracto de salida). En este último se incluye el estreñimiento de los ancianos, cuya manifestación clínica fundamental es el estreñimiento acompañado de impactación por fecalomas y la falsa incontinencia por rebosamiento.
  Referencia: http://bvs.sld.cu/revistas/san/vol_14_4_10/san12410.htm #Estreñimiento #Diverticulosis #Intestino #Gástrico #Gastroenterología